lunes, 9 de septiembre de 2013

CARTA ABIERTA A OLLANTA HUMALA TASSO

Carta Abierta al Sr. TC EP (R) Ollanta Humala Tasso
Presidente del Republica del Perú
Sr. Presidente:
Cada 29 de julio, en el Desfile Militar, desde que asumió el cargo, lo veo y escucho a Ud. Sr. Presidente de la Republica, Ollanta Humala, ex Cadete, ex Comandante del Ejército y ahora Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas, cantar el Himno de la Escuela Militar de Chorrillos, y me parece que no es consecuente su emoción en ese momento con las decisiones que toma con respecto a los oficiales también egresados del Alma Mater, ahora jubilados. Con los mismos cadetes y oficiales instructores, que pisamos las aulas de dicha Escuela, a los que también recibimos de la misma su tradición, usos y costumbres.
Como se sabe, Usted, ha liquidado la Cedula Viva, y se apresta, muy corajudamente, a disminuirlas al 50% y la de los discapacitados y viudas hasta el 25%. Con ello, pasará a la historia institucional, como un gran felón y en la historia nacional como el autor del mayor atropello legal de la época republicana.
Militar contra militar. Mejor dicho, militar que se sirvió del uniforme militar para ser político contra los militares que por vocación hemos seguido esa misma carrera, pero no ese objetivo. Usted como nosotros, ha ingresado y sobrevivido a las penurias de la iniciación y su transformación en miembro de una fraternidad profesional, y nos ha traicionado. Usted como nosotros, ha adquirido colegas para toda la vida, y nos ha jugado sucio. Las identificaciones comunes forjadas en cuatro o cinco años como cadete, producen una gran coincidencia de opiniones y una red de estrechos contactos personales, pero a Usted, no. Parece que lo único que sacó Usted provecho de éstos, es utilizar la carrera para alcanzar el poder y ascender a sus compañeros de promoción para evitar algún golpe militar durante el ejercicio de su gobierno.
El resto, no le interesa. Como oficial pasó como nosotros por la zona de emergencia. Su actuación allí, tiene algunos bemoles, felizmente anulados por jueces complacientes con el poder. No han corrido igual suerte, sus colegas que combatieron contra senderistas o MRTA, y permanecen indefinidamente en la cárcel sin pruebas ni el debido proceso. Es que su asociación con los llamados caviares, a la izquierda de la burguesía peruana, entre los que se encuentran los ahijados de Vargas Llosa conocidos por su posición anti militarista, parece maniatarlo y no dejarlo obrar en provecho de su propia institución. Y eso es grave. Por ello, no fue extraño, que desde la asunción de su gobierno nos mande decir a todos los oficiales en situación militar de retiro, que “busquemos nuestros abogados, porque la congelación de pensiones iba de todas maneras”.
No lo hizo ni Fujimori, ni Toledo ni García, y lo viene a hacer Usted militar ¿qué paradójico, verdad? Ante la historia institucional por consiguiente también será culpable de la división entre oficiales en actividad y oficiales en retiro.
Sera culpable también de que haya una división entre los oficiales que ostentan, con mucho esfuerzo y dedicación, los grados de general y coronel con los demás componentes de la jerarquía piramidal institucional. Ese venenoso propósito, lo lleva a aumentos indiscriminados, que hace que un comandante gane más que un coronel y otros tantos desbarajustes administrativos, los mismos que inciden contra la moral y disciplina de los institutos armados. Hace que dentro de unos años, se reduzca la pensión de viudas y sobrevivientes a su mínima expresión.
Su conducta, no nos debe extrañar, ya que su mismo paso, por el ejército, como oficial, está lleno de perfiles bajos. Siempre introvertido, como acumulando deseos de venganza y mala leche, contra la elite a la que nunca perteneció.Debe saber que, los oficiales en retiro, ganamos sueldos que con el tiempo se han equiparado a un empleado del servicio civil que ocupa el cargo de ascensorista o mesa de partes. Debe saber que, ante un hospital, bazar o comedores donde la atención es deficiente o los precios son altos, mejor es no acudir a ellos, pero eso involucra tomar un seguro de salud, un seguro oncológico, entre otros. Que los casi cuarenta años en la carrera militar, lleno de peculiaridades de un soldado combatiente o de la misma instrucción militar, hace que cuando uno llega a anciano, tenga molestias derivadas ya sea de haber sido comando o paracaidista o blindado o simplemente combatiente, y llegará el momento en que los sueldos serán solo propinas.
Sr. Presidente, es usted un ser privilegiado. El destino ha querido que siendo parte de una comparsa montesinista, haga usted una revuelta militar, que no lo capturen, que tenga acceso a la prensa, que la oposición política a los fujimoristas lo aprecie, lo envíe a dos agregadurías militares en el extranjero, que la burguesía caviar de izquierda lo escoja como su candidato, que los chavistas lo busquen y sea usted su aliado -hasta que habló con Obama y ahora es pro yanqui-, y que en medio de la situación de casi anarquía en el país, lo escojan, y salga presidente. Qué suerte la suya, Sr. Presidente. Que mala suerte, la de nosotros, los oficiales en retiro, al borde de los setenta años, con sueldos congelados, y con nuestros reclamos en manos de dizque tribunales de justicia, entre ellos el Tribunal Constitucional o el Poder Judicial, tanto es el odio que usted está generando en la sociedad civil hacia los uniformados, que por presiones políticas, razones ideológicas o simplemente anti militarismo, archivaran nuestros reclamos.
Que mala suerte la de usted, que el 28 de julio del 2016, solo será un presidente más del montón, y que buena suerte la de nosotros, que haciendo uso de nuestro seguro de fallecimiento, que nos cubre solo el 30%, iremos a la Gloria de Dios, sin remordimiento alguno y la palabra perdón en nuestros labios hacia su desleal comportamiento.
Atentamente
Víctor Velásquez Pérez Salmon
Coronel EP (R)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Excelente comentario mi coronel