lunes, 7 de febrero de 2011

LA ÚLTIMA DECISIÓN DE ALAN GARCÍA, QUE AFECTA A LOS PENSIONISTAS DE LAS FFAA Y DE LA PNP

Enrique Quiroga Carmona
Mayor General FAP (r)
Hace algunos días el Presidente de la República, anunció de manera sorpresiva e inadmisible, que había instado al Ministro de Economía y Finanzas, para que procediera a considerar un aumento para el personal de las FFAA y de la PNP, pero únicamente para aquellos que se encuentran en situación de actividad y en los grados de Teniente Coronel o equivalentes, y grados menores en la escala jerárquica. Esta petición así presentada, resulta simplemente una simulación política, porque el mencionado ministro, ha asumido el cargo en esta etapa final, simplemente para cumplir de manera fiel, lo que el Presidente Alan García le diga. Tan cierto es esto, que a los dos días de ese anuncio, el Ministro del Interior ya informaba públicamente de este aumento, a efectuarse en breve plazo.

Esta es evidentemente una decisión arbitraria más de este Gobierno, pero en este caso, infringiendo el derecho que de acuerdo a la vigente ley de pensiones para el personal militar y policial -DL 19846-, tiene el personal militar y policial en retiro, a poder renovar su pensión en relación a las remuneraciones del personal en actividad. Si bien es verdad, que quienes ostentan el grado de Teniente Coronel y demás grados de menor jerarquía, son los que perciben las peores remuneraciones, que son no solo injustas sino indignas, quienes con los mismos grados se encuentran en retiro, están en igual o peores condiciones, ya que ni siquiera perciben las bonificaciones que en algunos casos, pueden recibir los que están en situación de actividad.

Pero además, se estaría incumpliendo abiertamente el mandato de la Ley de Presupuesto para el año 2011, -ley 29626- que en su Décima Novena Disposición Complementaria Final, dispone que el Ejecutivo debe preparar y enviar al Congreso, dos proyectos de leyes sobre remuneraciones y pensiones respectivamente, para el personal militar y policial, y que en tanto no se aprueben estas normas, no podrá de oficio adoptarse medidas referidas a dichas percepciones económicas; y lo que es obvio, menos aun por cierto, si estas implican una flagrante violación de la ley. Pero ya sabemos por experiencia, tal como ocurre en este caso, que para el Dr. Alan García, la ley no es necesariamente un mandato, sino simplemente una referencia, que puede o no ser cumplida de acuerdo con sus muy particulares opiniones e intereses.

Lo que se está haciendo desde el gobierno es aplicarnos la conocida estrategia del “fait accompli” es decir “el hecho consumado”, y que obviamente de no variarse esta intención, haría mas complicada la defensa de nuestros derechos, ya que no quedaría mas remedio, que interponer las acciones cautelares pertinentes. Todo ello, ante el estupor e indignación del personal militar y policial, ciertamente cansado y desmoralizado, ante tanto menosprecio y falta de reconocimiento de parte del Gobierno a su esforzada y peligrosa labor. Resulta evidente para quienes integran la familia militar- policial, que el Dr. Alan García no quiere dejar la Presidencia de la República, sin antes haber logrado suprimir de la manera que fuere, el derecho a la renovabilidad de las pensiones militares y policiales.

No se ha tomado en cuenta a este propósito, que la moral del personal, es un aspecto fundamental en la eficiencia de cualquier ejército del mundo, y anunciar el empobrecimiento de las pensiones militares, -que sería el futuro de todo militar en actividad y retiro-, es una excelente forma de lograr la confusión, desmoralización, e intentar dividir internamente al personal militar y policial. Y el argumento de la urgencia económica al que se alude, referido únicamente al personal en actividad, es engañoso, irreal, y absolutamente ajeno a la seriedad y al respeto que merecemos los miembros de las FFAA y de la PNP. A nadie, ni siquiera al Presidente de la República le es lícito, tratar de violentar de esa manera los legítimos derechos de este personal, ni la sociedad debe permitirlo, si es que realmente aprecia, el valor de la Defensa Nacional.

(ESTAREMOS ATENTOS A TANTA INCONSTITUCIONALIDAD QUE VIENE COMETIENDO ESTE GARCÍA PÉREZ, NO SÓLO CONTRA LA FAMILIA MILITAR POLICIAL; SINO TAMBIÉN, CONTRA LA DEFENSA NACIONAL, PARA DENUNCIARLO ANTE LOS FUEROS PERTINENTES)

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