Alianza por la Reivindicación de las FFAA y PNPLima, 26 de octubre 2009
COMUNICADO Nº 010-2009-ALIANZA
Nos dirigimos a la ciudadanía en general para informarles que la ALIANZA POR LA REIVINDICACIÓN DE LAS FFAA Y PNP viene evaluando el accionar de nuestros gobernantes y sus aproximaciones a los múltiples problemas que afronta nuestro país, habiendo arribado, entre otras, a estas conclusiones.
A la fecha ya han trascurrido más de tres largos años del actual gobierno, arrastrando frustraciones para las grandes mayorías, incluyendo a la familia militar-policial en pleno. La clase política no quiere entender o comprender lo que significa gobernar visando el verdadero interés nacional. La soberbia va de la mano con una imaginación imperialista en provecho de los grupos de poder económico y en detrimento de los pobres del país.
El independiente, tecnócrata, terco y extranjerizado ministro Carranza, hoy naviero con visión marítima de un trasatlántico Perú a muchos años vista, junto con el inefable, confundido y desubicado canciller García Belaúnde, encabezan un gabinete de comparsa. El presidente García, obsesionado en concesionar lo más pronto posible todo el país, bajo pretextos de crear infraestructura –con inaceptables astronómicas revisiones de precio- y de explotar los recursos naturales -de preferencia petrolíferos, gasíferos y mineros, atentatorios contra el débil equilibrio ecológico nacional, sin consulta previa a comunidades y nativos - avanza cual “Titanic”, sin darse por enterado de los escándalos y corrupción por doquier, llámense “Bagua”, “Gas de Camisea”, “Puerto de Paita”, “Petroaudios” y sus misteriosas secuelas que se pretende esconder, etc., etc.
Nuestra patria vive momentos difíciles. Sufre una patética orfandad de liderazgo político que afronte la construcción de un Estado poderoso, nacional, firme y decidido a construir un Perú honesto, libre y digno, donde primen la estabilidad jurídica y moral para nuestros connacionales, sin brindarle privilegios a inversionistas normalmente ventajistas, sean locales o extranjeros.
Brillan la soberbia e incapacidad, haciendo caso omiso a los gravísimos peligros como el narcotráfico, habiendo dispuesto la participación de las FFAA y PNP en el VRAE y en el Huallaga, sin contarse con la debida inteligencia estratégica y operativa así como sin los necesarios medios de apoyo y equipamiento aceptable. Ante ello, señalamos la responsabilidad de los gabinetes ministeriales, así como criticamos la reprobable sumisión de los mandos militares y policiales, al cumplir órdenes sin exigir los requerimientos elementales para afrontar sus misiones y tareas a fin de minimizar el costo social y restringir el dolor de los esforzados mártires defensores de la patria.
Es vergonzante que se continúe “la política revanchista antimilitar Paniagua”; que se persista en “la unilateral política de desarme Toledo”. Denunciamos que un país desarmado no es una garantía de paz, un país desarmado es una presa apetecible. La historia así lo demuestra. Basta de “promocionar” la ingenua propuesta de “Pactos de no agresión”, denominada por la servil cancillería como “Doctrina García”. Emplazamos al gobierno a ser responsable e iniciar un equipamiento defensivo, sin la menor intención de entrar en una carrera armamentista, de manera de ir superando tan prolongada inacción.
En el anterior CADE, el presidente García informó haber recibido hasta a 1,780 inversionistas, de los cuales ya 80 habían plasmado inversiones en nuestro país. A no dudar, este accionar le habrá insumido días y semanas de dedicación. Señalamos que en abierta contradicción a los esforzados defensores de la patria que demandamos justicia en nuestras remuneraciones, pensiones, goces y beneficios, no nos ha concedido siquiera unos minutos para tratar nuestro caso. Sólo nos impone la dictadura del presupuesto. ¿Alguien puede dudar de la justicia de nuestras demandas sociales con 20 años de relegamiento? ¿Dónde están los líderes que deben defender la democracia y la equidad social en un estado de derecho?
HERMANOS : Enfrentamos TIEMPOS DE LUCHA. Reclamamos la deuda que la Nación tiene con nosotros. Exigimos la reivindicación de las FFAA, PNP, sus viudas, discapacitados y deudos, en lo político, moral, social y económico. Ya llegó la hora para la reconciliación nacional con los que visten o hemos vestido el uniforme de la Patria, porque nos asisten la razón, las leyes y la historia, en tanto el presente y el futuro así lo demandan.
Por lo expuesto, la ALIANZA ha acordado por unanimidad, apoyar y participar en la Gran Marcha del 12 de noviembre organizada por el FRENTE NACIONAL MILITAR POLICIAL (FRENMILPOL), puesto que coincidimos en todas las exigencias donde priman la solidaridad y la convergencia de esfuerzos.
A la fecha ya han trascurrido más de tres largos años del actual gobierno, arrastrando frustraciones para las grandes mayorías, incluyendo a la familia militar-policial en pleno. La clase política no quiere entender o comprender lo que significa gobernar visando el verdadero interés nacional. La soberbia va de la mano con una imaginación imperialista en provecho de los grupos de poder económico y en detrimento de los pobres del país.
El independiente, tecnócrata, terco y extranjerizado ministro Carranza, hoy naviero con visión marítima de un trasatlántico Perú a muchos años vista, junto con el inefable, confundido y desubicado canciller García Belaúnde, encabezan un gabinete de comparsa. El presidente García, obsesionado en concesionar lo más pronto posible todo el país, bajo pretextos de crear infraestructura –con inaceptables astronómicas revisiones de precio- y de explotar los recursos naturales -de preferencia petrolíferos, gasíferos y mineros, atentatorios contra el débil equilibrio ecológico nacional, sin consulta previa a comunidades y nativos - avanza cual “Titanic”, sin darse por enterado de los escándalos y corrupción por doquier, llámense “Bagua”, “Gas de Camisea”, “Puerto de Paita”, “Petroaudios” y sus misteriosas secuelas que se pretende esconder, etc., etc.
Nuestra patria vive momentos difíciles. Sufre una patética orfandad de liderazgo político que afronte la construcción de un Estado poderoso, nacional, firme y decidido a construir un Perú honesto, libre y digno, donde primen la estabilidad jurídica y moral para nuestros connacionales, sin brindarle privilegios a inversionistas normalmente ventajistas, sean locales o extranjeros.
Brillan la soberbia e incapacidad, haciendo caso omiso a los gravísimos peligros como el narcotráfico, habiendo dispuesto la participación de las FFAA y PNP en el VRAE y en el Huallaga, sin contarse con la debida inteligencia estratégica y operativa así como sin los necesarios medios de apoyo y equipamiento aceptable. Ante ello, señalamos la responsabilidad de los gabinetes ministeriales, así como criticamos la reprobable sumisión de los mandos militares y policiales, al cumplir órdenes sin exigir los requerimientos elementales para afrontar sus misiones y tareas a fin de minimizar el costo social y restringir el dolor de los esforzados mártires defensores de la patria.
Es vergonzante que se continúe “la política revanchista antimilitar Paniagua”; que se persista en “la unilateral política de desarme Toledo”. Denunciamos que un país desarmado no es una garantía de paz, un país desarmado es una presa apetecible. La historia así lo demuestra. Basta de “promocionar” la ingenua propuesta de “Pactos de no agresión”, denominada por la servil cancillería como “Doctrina García”. Emplazamos al gobierno a ser responsable e iniciar un equipamiento defensivo, sin la menor intención de entrar en una carrera armamentista, de manera de ir superando tan prolongada inacción.
En el anterior CADE, el presidente García informó haber recibido hasta a 1,780 inversionistas, de los cuales ya 80 habían plasmado inversiones en nuestro país. A no dudar, este accionar le habrá insumido días y semanas de dedicación. Señalamos que en abierta contradicción a los esforzados defensores de la patria que demandamos justicia en nuestras remuneraciones, pensiones, goces y beneficios, no nos ha concedido siquiera unos minutos para tratar nuestro caso. Sólo nos impone la dictadura del presupuesto. ¿Alguien puede dudar de la justicia de nuestras demandas sociales con 20 años de relegamiento? ¿Dónde están los líderes que deben defender la democracia y la equidad social en un estado de derecho?
HERMANOS : Enfrentamos TIEMPOS DE LUCHA. Reclamamos la deuda que la Nación tiene con nosotros. Exigimos la reivindicación de las FFAA, PNP, sus viudas, discapacitados y deudos, en lo político, moral, social y económico. Ya llegó la hora para la reconciliación nacional con los que visten o hemos vestido el uniforme de la Patria, porque nos asisten la razón, las leyes y la historia, en tanto el presente y el futuro así lo demandan.
Por lo expuesto, la ALIANZA ha acordado por unanimidad, apoyar y participar en la Gran Marcha del 12 de noviembre organizada por el FRENTE NACIONAL MILITAR POLICIAL (FRENMILPOL), puesto que coincidimos en todas las exigencias donde priman la solidaridad y la convergencia de esfuerzos.
SECRETARÍA DE IMAGEN Y PRENSA
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